Cuando hagas una entrevista, tomes una fotografía o escribas sobre un fenómeno gastronómico jamás olvides que la gastronomía y sus manifestaciones (recetas, utensilios, productos, anécdotas, etc.) son resultado de un profundo proceso humano, que son muestra de los saberes de un individuo que está conectado con un grupo determinado llamado sociedad.
Reconocer que trabajamos con humanos es parte fundamental de la investigación gastronómica, porque esto nos permite ser considerados y congruentes en las formas que nos relacionamos con los otros para obtener conocimiento, para vincularlo con otras personas, o para divulgarlo a través de alguna herramienta de comunicación.
El Humanismo, junto con la Ética, son valores fundamentales del investigador y son dos de sus tres principales herramientas de trabajo. De aplicarse correcta, consciente y consistentemente, se convierten en la mejor manera para asegurar productos de investigación (textos, publicaciones en redes, tesis o material en general) que permita la adecuada comprensión de aquello que se investiga.
Todos podemos ser investigadores y todos somos material para ser investigado. Aplicar estos valores nos asegura, primero, ser mejores personas y luego mejores profesionales.
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